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Por favor, NO FUME. El humo del cigarrillo produce cáncer

jueves, 1 de octubre de 2009

Cartas-cadena


Este artículo, enviado por nuestro colaborador Daniel Chávez Córdova es interesante para los internautas que tienen cuenta de correo electrónico y continuamente reciben estas cartas-cadena:

Carta anónima de un Ex-Ferviente Seguidor de las Cartas-Cadenas por Internet:
Gracias por todas las cartas-cadena - buenas para nada - que me han enviado. Las mismas que me han tenido muy ocupado tratando de encontrar alguien a quien reenviárselas siempre que no me las hayan enviado antes a mí.
Las he seguido al pie de la letra y gracias a ellas y a ustedes mi vida ha devenido en casi un infierno por lo que he adoptado las siguientes actitudes:
1. Ya no saco dinero de los cajeros automáticos porque me pueden clonar la tarjeta y después me roban mi dinero.
2. Dejé de tomar ciertas bebidas gaseosas después de enterarme que sirven para quitar el sarro de los inodoros y además oxidan los genitales y la ropa interior.
3. Dejé de ir al cine por miedo a sentarme en una butaca y pincharme con algún objeto infectado con el VIH.
4. Apesto como un chivo, porque dejé de usar desodorante ya que según sus cadenas, producen cáncer en las axilas.
5. Ahora ya no hago caso a las luces rojas del semáforo por miedo a que me droguen con la muestra de un perfume para robarme el vehículo y quizás hasta me violen.
6. Suspendí el consumo de varios alimentos por miedo a los estrógenos, a los transgénicos y a no sé que más.
7. Dejé de comer pollo y hamburguesas porque según sus cadenas no son más que carne de quizás de engendros horripilantes cultivados en un laboratorio.
8. Tampoco hago más el amor con preservativos porque pueden venir intencionalmente agujereados y podría adquirir cualquier enfermedad.
9. Gasté más de 5,000 dólares en repetidas limpiezas de virus de mi computadora por las cadenas que venían infectadas con algún virus, spams, y otros. Porque ustedes simplemente me “reenviaban” sus cadenas sin antes editarlas con todos los e-mails incluídos, por el miedo a sufrir las amenazas.
10. Doné más de 500 dólares de mis ahorros a las 638 cuentas de una niñita enferma que estuvo a punto de morir unas 7,245 veces en 4,354 hospitales y que todavía tiene siete años desde 1,993.
11. Dejé de hacer, tomar, y comer tantas cosas, porque según estas benditas cadenas provocaban cáncer, disminuían la potencia sexual, me crecería el pelo por todo el cuerpo, o se me caería todo el cabello, que me engordarían indefinidamente hasta explotar, etc, etc, etc.
12. Esperé durante años como un tonto, los 150,000 dólares que me enviarían ciertas empresas por participar en la prueba de rastreo de los e-mails.
13. El viaje a Europa con gastos pagados tampoco llegó.
14. No recibí el millón de dólares, ni el Ferrari, ni tuve un fin de semana largo de diversión con Jennifer López (las tres cosas que pedí como deseo después de reenviar a más de 100 personas el "Mantra Mágico").
15. Envié más de 500 firmas así como e-mails en contra de la guerra y ahora me dijeron que estoy en la lista de indeseables y no puedo entrar ni como turista a varios países.

Envié mis datos personales y financieros pues eran los requisitos para hacer –lo que creí iba a ser el negocio de mi vida cual era recibir directamente en mi cuenta de ahorros cien mil dólares de una viuda de un ex presidente de un país africano asesinado y necesitaban de alguien para poder sacar varios millones de dólares de ese diminuto y desconocido país. ¡Al final no he recibido nada y por el contrario me han sacado todo el dinero que tenía en mi cuenta!
En algún lugar del mundo alguien se estará riendo de lo ingenuo y tonto útil que fui y ahora estará utilizando mi e-mail para enviarme mas propagandas que nunca pedí o enviarme spams a mi inbox o para otros non santos propósitos.
Como verán mis queridos amigos, después de recibir estas cartas-cadena mi vida cambió, para mal por supuesto.
Estoy seguro de que mis actuales problemas son por alguna cadena que se me olvidó reenviar y esté sufriendo ahora una maldición de las tantas que me amenazaban en cada carta....
Adiós.
El Ingenuo.

Ya saben amigos, cuando reciban este tipo de mensajes, elimínenlos sin más ni más. No les vaya a pasar como al Ingenuo.
Nota.- Para ver la imagen ampliada, hacer clic sobre ella.

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