Nuestro colaborador capitán Daniel Chávez Córdova nos envía esta contribución a nuestro blog relacionada con los sucesos ocurridos a raíz de una filmación clandestina hecha al general de Policía Élmer Miguel Hidalgo Medina, director general de la Policía Nacional, en la que haciendo mención a una cita bíblica pronunciada por Jesús, y que al igual que en ese entonces, quienes querían lapidarlo salieron despavoridos sin tener el valor de tirar la primera piedra.
Con el respeto que nos merece la investidura del general Hidalgo, la publicamos en nuestro blog que es un espacio libre y que está a disposición de quienes hemos vestido el uniforme de la GRP, siempre que se haga sin faltar el respeto y consideración debidos.
La Administración.
3 comentarios:
Mi General:
Miguel Mayuri
Sin aludir al protagonista de esta nota, quiero referirme conforme a la palabra de Dios, es decir la biblia lo siguiente:
Marcos 4:22 "Porque no hay nada oculto que no haya de ser manifestado; ni escondido,que no haya salir a luz".
El que no reconoce sus pecados y no se arrepiente, se vuelve soberbio, y Dios en el libro de 1 de Pedro, dice que resiste a los soberbios y en el libro de Daniel, que humillara a los soberbios, por ello muchas autoridades se encuentran en esta situacion ultima, despues de haber sido tales, precisamente puestos por Dios, y no supieron ejercerla con sabiduria.
Que Dios de sabiduria a nuestras autoridades y asimismo les bendiga.
Francisco J. Arones V.
Un afectuosos saludo mi General.
todo el trabajo que hace la PNP(investigadores) contra el crimen organizado es oculta, confidentes, etc, que seria si le advertimos que lo vamos a seguir, que lo vigilamos, si ud.,es un PNP honorable no defienda a sinverguenzas, ya vera cuando se vaya su compadre caballo loco, ojala que se lo lleve a Paris, porq si c queda aca se va a cana, por petro audios(ocultamiento y desaparicion de pruebas, peculado etc, el poder es pasajero, y en la pnp no hay subordinados sino aduladores.
Un poco fuerte su comentario, mi querido Anónimo.
Los policías estamos expuestos a esos riegos que Ud. enuncia, y muchas veces los inocentes somos los que "pagamos pato".
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